MANES DE DESRAELI

La Alergia a  los Ingleses Habría Originado la “Locura” de Talal

por Victor Almagro

EXCLUSIVO

       PARIS.-  La política no deja en paz al rey Talal de Jordania.  Su oficio se vuelve cada día más difícil y son más numerosos los monarcas que desean retirarse de la vida privada que aquellos aspirantes al trono ambiciosos de poder regio. Los partidarios de la doctrina del origen divino del poder no consiguen convencer, frecuentemente, a los príncipes de la sangre para cumplir ese supremo mandato.  El caso del rey Talal parece diferente.  Ha demostrado dos síntomas evidentemente alemanes; expresar su antipatía por el imperialismo británico, (que dominó a su padre Abdullah y a toda Jordania) y asumir todas las responsabilidades de su cargo.  Estos dos rasgos de absolutismo, encontraron en el muy democrático parlamento de Jordania una oposición que hasta comparten algunos miembros del gabinete.

            La prensa mundial, con su diligencia acostumbrada, y los editoriales pomposos del “Times” de Londres, atribuyen a los desórdenes mentales del rey la culpa de la actual situación política de Jordania.  Talal se encuentra en manos de los facultativos y pasa de las clínicas suizas a los sanatorios de la penicilina al “electroshock” municiones terapéuticas  son seguidas muy  celosamente por el gabinete británico, que no sufre ningún  genero de angustias por la  salud del rey jordanio sino por la suerte que le espera a la influencia inglesa en Medio Oriente. Es evidente que hasta los desórdenes nerviosos alteran el equilibrio político en los países árabes; los primeros afectados son los británicos, hecho que revela la debilidad del imperio.

¿Locura o diplomacia secreta?

Este asunto de la demencia de Talal es bastante intrigante. Cuando su padre fue asesinado en el mes de julio del año pasado, su hijo mayor se encontraba en una clínica  suiza. Ya era conocido en el Foreign Office por sus opiniones antibritánicas hecho que, considerado aisladamente, no es una expresión de locura sino de cordura, sobre todo teniendo en cuenta la subordinación total de su padre a los dictados la política de Londres.

 Para Gran Bretaña, Jordania constituye su base esencial en el Medio Oriente. La ascensión al trono de Talal significó un rudo golpe a esa influencia., pero, curiosamente, los ataques  mentales del rey comenzaron bien pronto y hubo de ser recluido en varias clínicas europeas. Sin pretender sutilizar demasiado sobre los métodos del Intelligence Service, cuya fantasía policíaca es notable, cabe interrogarse que relación existe entre la locura – real o supuesta- de un rey rebelde a la política británica y los vulnerados intereses del Imperio.

 Como se sabe, el Emir Feisal murió misteriosamente en un hotel europeo, después de haber sido traicionado por Lawrence y los ingleses en la guerra árabe de 1914-1918. Otros príncipes y políticos molestos corrieron una suerte parecida en los azares petrolíferos del Medio Oriente.  A  la luz de estos  antecedentes, la locura de Talal es un tanto misteriosa. Admitiéndola, el probable sucesor en el trono seria su hijo Hussein, que tiene 16 años. Su tutor indicado y regente del reino seria Abdullah, regente actual del Irak y agente fiel de la diplomacia británica en la familia hachemita. Esta maniobra perfecta, en la que se mezclan el espionaje, la herencia, la locura y el Imperio, es digna de Disraeli.

Articulo publicado en el Diario Democracia

Edición del martes 1 de julio de 1952 (Pág. 1)

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